Andy García y Cachao

Cachao y Andy García, dos grandes artistas de Cuba

El rey de la descarga cubana (jam sesion), Israel López (Cachao) y el actor Andy García (El Padrino) fueron grandes amigos, ahora me entero, a través de la revista Latin Beat, de aquel encuentro memorable entre dos grandes artistas cubanos.

"Pronto se cumplirán veinte años de aquel encuentro, en 1989, en San Francisco, California, en los días de las preparaciones de la película "Godfater III". Pero cuando me enteré que Cachao estaba en el Festival de Jazz de la ciudad en un tributo a la música cubana, invitado por John Santos y con Chocolate Armenteros, Armando Peraza y Santana, inmediatamente fui a verlo. Esa noche para mí fue inolvidable. No solamente pude escuchar sus danzones en vivo por primera vez. Pero al fin pude conocerlo. Y con mucho cariño y un poco de coraje le presente una idea que se me había ocurrido: "Maestro quiero hacerle un homenaje. Recuerdo que se sonrió y me dijo 'Oye eso, ¡Ahora Sí!...!A gozar!' "

Así comenzó la intensa amistad entre Cachao y Andy García quien fue adoptado como hijo del veterano contrabajista de Arcaño y sus maravillas. Una interrelación que duro 18 años, uno de los logros mas importantes de la vida de Andy.
“Yo empecé a verlo tocar localmente, de vez en cuando en Miami con la Charanga de Hansel y Raúl, o descargando en el “Crossway”. Pero siempre de lejos. Solo escondido en la oscuridad, un joven fanático y penoso, con miedo de acercarse y conocer en persona a su maestro. Porque el ya era mi maestro, sin que el lo supiera”.
Pero Andy ya sabía de la existencia de Cachao mucho antes de eso. Saber de Cachao fue un regalo de su padre. Su padre era del pueblo de Bejucal en La Habana, un municipio muy gozador de charangas y fiestas negreras. Bejucal es el pueblo más divertido de Cuba, yo lo visitaba en mi juventud, asistía a las fiestas de quince (ten ages) buscando sus mujeres esplendorosas que tiene.

Al padre de Dany le llamaban “El Alcalde”, porque era el Presidente de una sociedad llamada El Liceo de Bejucal, que todavía está allí, frente al parque. “Yo tuve el sueño de estar escuchando a Cachao en un “Té bailable”. Cuando le dije a mi padre que le haría un homenaje a Cachao, el me contestó: “!Cachao! Qué está haciendo ese descarado!”
El Presidente le contó a su hijo Andy que contrataba a Cachao, para que tocara en el Liceo de Bejucal. Eran los tiempos en que Andy era muy niño, visitaba mucho a la famosa cafetería Los Pinos Nuevos, para comer helados de mantecado y dulces especiales. Estaban de moda: Arcaño y sus Maravillas, Arsenio Rodríguez y Melodías del 40 (los tres grandes); después la Aragón, Sensación, Fajardo y sus Estrellas, La Sonora Matancera, El Casino, Los Jóvenes del Cayo, Benny More y las jazz band de lujo.

“Yo había pasado toda mi vida escuchando la música cubana, y descubriendo fragmentos de Cuba en ella. Pero el momento consciente y preciso de conexión con la música de Cachao viene de la disquera “Do Re Mi, donde descubrí a Cuba de nuevo. Desde niño sentí una dedicación religiosa ante su arte. A Benny Moré, Rolando Laserie, Ignacio Piñeiro, Cuní, Chapottín, Los Papines, Los Muñequitos de Matanzas, Fajardo, Abelardo Barroso con la sensación, Celia Cruz y La Sonora Matancera, bebo Valdés, la Riverside, Miguelito Valdés con la Casino de la Playa, Chano Pozo, el gran maestro Arsenio, Maria Teresa Vera, el trío Matamoros. Y la lista se extiende. Pero el que me toco el alma fue Cachao con sus descargas, con la sección de ritmo mas importante de la historia de Cuba (Tata Guiñes, Guillermo Barreto, Yeyito “Masa Limpia” Iglesias, Gustavo Tamayo y el maestro del bajo y el piano. Con solistas como Orestes López, el “Negro” Vivar, Generoso Jiménez “El Tojo”, Richard Egues, Emilio Peñalver, El “Niño” Rivera, Peruchín. Ahí me entere de la grandeza de Cachao, y ahí me entregue a Cuba y a Cachao”.
Cachao y el Alcalde se volvieron a abrazar en ese gran concierto de homenaje. “Ahora se vuelven a encontrar –dice Andy-, en el cielo, ambos murieron con dos días de diferencia, en años distintos”.

Cachao es considerado –junto a su hermano Orestes-, dos de los creadores del mambo, dentro de los experimentos que realizaron desde finales de la década de 1930 en la orquesta de Arcaño y sus Maravillas. También es considerado Cachao uno de los reyes de la descarga y el iniciador del bajo utilizado como “solista”, utilizaba el arco como instrumento de percusión rítmica y hasta lo golpeaba, formando un lío tremendo. Compuso más de mil obras, a veces unas cuatro piezas diarias. Hay que incluir las excelentes composiciones de Cachao, especialmente “Buena Vista Social Club”, instrumental que sirvió de tema al fenómeno del renacimiento del son y la trova tradicional en 1997. Alcanzó dos Premio Grammy y uno Latino, tocó e cientos de orquestas estelares, grabó cinco discos producidos por Andy García. Cachao fallecio el 22 de marzo del 2008 había nacido en La Habana el 14 de septiembre de 1918. Nació en la misma casa donde vino al mundo el apóstol de Cuba José Martí.

Cuando entrevisté a Cachao en el 2000, en Nueva York, le pregunté por su relación con Andy García y me contestó: “Ese muchacho tiene Coimbra, tiene aché (gracia y aché), se encariñó conmigo y él también me dio un nuevo aire de vida con su documental y los discos que grabamos”.
Andy considera a Cachao como un padre musical, “Es la “mata” y de esta mata crece nuestras más queridas raíces, nuestras tradiciones, nuestra música.