El médico personal de Diego Maradona, Alfredo Cahe, afirmó ayer en una entrevista al diario deportivo italiano La Gazzetta dello Sport que hay que agradecer a Dios que el mítico ex jugador argentino siga vivo.
El astro, que supo maravillar con sus gambetas al planeta futbolero, se encuentra internado en la Capital Federal para luchar contra su adicción al alcohol, tras superar un severo cuadro de hepatitis tóxica por el que estuvo hospitalizado 22 días.
"Creo que muchas otras personas en este punto estarían ya muertas. Con Diego en cambio tenemos que dar gracias a Dios", afirma Cahe.
El médico afirma que tres hechos hicieron que Maradona salvara la vida.
"primero, que por suerte me encontrase siempre cerca de él en los momentos de emergencia. Segundo, que en esas situaciones graves se consiguiera salvarlo, sabiendo que en diez casos como el suyo, ocho se fueron con el Creador. Tercero, que Diego siempre tuvo confianza en mí, lo que es fundamental para un médico", añadió el facultativo.


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