Aburrido e intrascedente, por culpa de la propia organización de la 'Premier'. Así calificó Mourinho el Chelsea-Manchester que el pasado miércoles ni sirvió para decidir nada toda vez que el título está decidido, ni ofreció atisbo de espectáculo o goles.
Pero el sentido de las palabras del portugués van más allá de la estética y de lo obvio. Y es que este duelo estaba inicialmente previsto para el 15 de abril, momento en el que el cuadro londinense estaba a tres puntos del United. El calendario se modificó entonces porque los dos tenían compromisos de Copa.
Esta falta de previsión es una de las quejas de Mourinho: "Es difícil aceptar que no jugamos en su fecha. La 'Premier League' es la mejor del mundo y no puede permitirse estos errores, que el duelo entre Chelsea y Manchester coincida con las semifinales de Copa cuando existían muchas opciones de que alguno pudiera estar ahí".
Por no hablar de lo que hubiera podido pasar en el caso de haber jugado en el momento. El luso asegura que el aplazamiento perjudicó a su equipo: "Si hubiésemos jugado a mediados de abril con seis o siete partidos más por disputar, no digo que hubiéramos ganado el partido o la liga, pero no creo que sea correcto lo que ha sucedido.".
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