Pedrito Calvo saludó el verano con la EGREM

Pedrito Calvo se presentó el pasado sábado 21 de julio en el Teatro Karl Marx, en las festividades de verano organizadas por la EGREM. El veterano cantante está celebrando sus 70 años y el aniversario 40 de su llegada a Los Van Van, por eso invitó a su concierto de gala a: José Luis Cortés, Gardi, Osamu, David Blanco, Mayra Michel, Tata Güines (hijo) con sus tambores.

El ex-cantante de Los Van Van interpretó algunos de sus éxitos con la orquesta de Juan Formell y acompañó a sus invitados en temas muy populares:

El primer invitado fue José Luis Cortés, compañero de Los Van Van, interpretaron el danzón La mora, de Eliseo Grenet, en versión magnífica. David Blanco recordó el tema Muévete, de Juan Formell, grabado en la década del 80 por Rubén Blades, Gardi selecciónó la canción Marilú (Juan Formell), muy bien cantada a dúo con Pedrito.

Mario Valdés, compañero de Pedrito en Los Van Van, paró el teatro con aquel tema de Rodulfo Vaillant, “Se muere de sed la tía”. Osamu interpretó un tema pop; Tata Güines (hijo) acompañó a Pedrito en la composición “Así es la humanidad”, éxito de Benny Moré. La esposa de Pedrito Ianna Machado le hizo un homenaje a Toña la Negra con la creación de Agustín Lara, Veracruz.

Pedrito Calvo estrenó su nueva charanga en el siglo XXI: La Nueva Justicia con un formato y orquestación parecido a Los Van Van. El cantante de la Nueva Justicia nació en Guanabacoa, en una familia muy musical, entre solares y tambores de babalaos y rumberos, se desarrolló su juventud. “En esa etapa – me contó en el camerino del Karl Marx- vendía periódicos, trabajaba de zapatero, vendedor de mangos, en carnavales repartía serpentinas y jugaba mucha pelota, no hay quien me haga un cuento en este mundo”.

El padre quería que Pedrito estudiara violín, pero al niño solo le interesaba cantar y cantar. En una ocasión un pastor de escuela Bautista le preguntó si se atrevía a cantar y por ahí fue empezando todo; “ellos me enseñaron a cantar y con esa preparación me presenté en 1957, en el concurso de La Corte Suprema.

Pero la música no daba para comer y Pedrito volvió a su oficio de zapatero, “zapatero a sus zapatos”. De repente su padre necesitaba un cantante para la orquesta y alguien le dice que su hijo Pedrito cantaba. “Entonces me dijo – hace falta que vayas a cantar en la orquesta. Ese fue mi bautismo profesional, hasta que llegó la etapa de las Milicias y la invasión de Playa Girón y yo con mi fusil en el hombro”.

Entre escopetas, fusiles y cañones estuvo Pedrito buena parte de la década de 1960 en que vuelve de nuevo con la orquesta de su padre hasta 1968. Después llega a cantar con Los Jóvenes del filin, Pancho el Bravo, La Ritmo Oriental.
“En la Ritmo – recuerda Pedrito - canté éxitos como 'Mi socio Manolo', 'Se baila así', 'Aquí el que manda es Mulé'. Un día Pupy y el tumbador el Yulo (fallecido ya) me preguntan si quería cantar con Los Van Van, Formell estaba indeciso, pero yo confiaba en lo mío”.

En 1972 el cantante Lele abandona Los Van Van y ahí comienza su gran momento. “Pedrito fue un trabajo que proyectamos con mucho tiempo en Los Van Van – especifica Juan Formell - fui perfilando su estilo y se convirtió con el tiempo en uno de los cantantes que identificó a la orquesta por mucho tiempo. Le aportó a Los Van Van ese toque de picardía criolla, una buena garantía de la orquesta”.

Junto a Los Van Van Pedrito se mantuvo fiel hasta el 20 de noviembre del 2000, después de una gira por Argentina y Uruguay. “Tuve la oportunidad de compartir con verdaderas estrellas de la música. Me separé de ellos con un buen average, tenía colocado un hit con 'El negro está cocinando' ”.

Después de la salida de Los Van Van, Pedrito comenzó a hacer algunas presentaciones con NG La Banda, con el Afro Cuban All Stars de Juan de Marcos González, hasta que decide conformar la orquesta La Justicia.
Pedrito Calvo es uno de los cantantes que llenó una época en Los Van Van y la música bailable cubana, uno de los ídolos más apreciados por el gran público cubano.